NTRA. SRA. DE CHIQUINQUIRÁ: Patrona del Zulia
En
el Siglo XVI los frailes Dominicos traen la imagen de la Virgen del Rosario a
Colombia para convertir a los indígenas al catolicismo. Ciento veintitrés años
después, el 18 de Noviembre de 1.794, el milagro de la renovación de Nuestra
Señora sobre una tablita vuelve a ocurrir en Maracaibo (ciudad capital del
Estado Zulia-Venezuela) igual al ocurrido en aquella época sobre una manta
pintada por un pintor de Tunja (Co) acompañada por San Andrés y San Antonio,
lo que dio lugar a la advocación de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá.
La Chinita, como amorosamente le decimos los zulianos, quiso manifestarse en
estas tierras para que la venerásemos como nuestra patrona y Madre Celestial.
Pero, veamos como fue tal renovación:
En una mañana calurosa de Noviembre de 1.794, una viejecita, quien acostumbraba
lavar sus ropas en las tranquilas aguas del Lago de Maracaibo, recoge una
tablita que flotaba en el mismo. Habiéndose hecho ya la noche, regresa a su
humilde hogar con la tablita confundida entre las ropas de su tinaja. Una vez en
su casa, al día siguiente, la viejecita observa que en la tabla se refleja la
silueta de la imagen sagrada de una Virgen con rasgos indígenas, lo cual motivó
que la colocara colgada en una pared. El Lunes 18 de Noviembre se sintieron una,
dos y tres veces unos golpes y ruidos extraños, la viejecita corre hacia la
habitación donde se encontraba la tablita y la consigue toda resplandeciente,
iluminada con luces que se difundían como un arco iris, de rodillas cae y
exclama: ¡Milagro! ¡Milagro!
Desde ese día la casita se convirtió en santuario de la Virgen del Rosario de
Chiquinquirá. Años más tarde, por decisión eclesial y por voluntad de la
propia Virgen es trasladada hacia el Templo de San Juan de Dios, puesto que
cuando iba a ser llevada hacia la Catedral, se hace tan pesada la imagen que es
imposible que la fuerza de varios hombres pudieran conducirla hacia dicho lugar.
Emprenden entonces un giro hacia la derecha y la imagen retoma su peso normal,
permitiendo que sea ubicada en el templo.
Posteriormente, el 18 de Noviembre de
1.942, 193 años luego del milagro, la Iglesia Católica corona canónicamente
el retablo de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá de Maracaibo, se
celebra por vez primera oficialmente el día de la Virgen Patrona y se consagra
la Basílica en su honor.
Hoy, la venerada Madre de Dios y Madre Nuestra coronada en el Cielo con doce
estrellas sobre su cabeza, es fuente de inspiración de muchos poetas y cantores
de la región en el acontecer de su música tradicional.
Honremos entonces a nuestra Patrona rezándole la siguiente oración:
"ACORDAOS"
Acordaos ¡oh piadosísima Virgen María! que jamás se ha oído decir que ninguno que haya acudido a Vos implorando vuestra asistencia y reclamando vuestro socorro, haya sido abandonado por Vos. Animado con esta confianza, a Vos también acudo ¡oh Virgen Madre de las Vírgenes! y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante vuestra presencia soberana, no desecheis ¡oh purísima Madre de Dios! mis humildes súplicas, antes bien, inclinad a ellas vuestros oídos y dignaos atenderlas favorablemente. Amén.
San Bernardo
HIMNO A NTRA SRA DE CHIQUINQUIRA